Desde aquí nada cambia, pero todo es diferente.
Sin un corazón latente no hay mente que no se intente
suicidar. No se fingen sentimientos,
desde aquí ya no hay tormentos, ni se oculta lo que miento,
Así que miénteme. No quiero luz en esta sombra,
quiero saber caminar por ella y con el viento en contra.
Nada importa, y todo es importante.
Encontré escondido entre el rencor pedazos de arte.
Punto y a parte, al menos hoy.
Me cansé de repetirme que soy como soy.
Mira al frente y para alante. Crecí con la gran mentira
de pensar que si era fácil no sería interesante.
Y ahora mira, de madrugada y con insomnio.
Aprendiendo a agradecer lo que ya por constante es obvio.
Desde aquí ya no odio. Pero Dios no creo que escuche.
Pensamientos en voz alta que me piden que no luche.
Que no me resista. Desde aquí ya no hay cristal.
Y el silencio se camufla entre el sonido del tic-tac.
Desde aquí encontré la paz y me siento preparado
para asimilar la mortalidad y sus estragos.
Por debajo del disfraz,
se desgarra un alma de tanto gritar.
Tras la máscara no hay más
que una lucha interna por poder brillar.
Desde aquí todo se sabe y nada sabe si es real.
Desde aquí todo lo bueno y malo puede ser igual.
Desde aquí no existe sal que cure tus heridas
ni hay arena que compense, da igual cuantas sean de cal.
Tantas idas y venidas que no se si voy o vuelvo,
siento que tengo las piezas del puzzle y no lo resuelvo.
Desde aquí se ven algunas estrellas
que por más que llueva o truene, nunca dejan de brillar.
Desde aquí me falta mi mitad y se que yo le falto.
Me creí más fuerte y sangro como todos los demás
Desde aquí no hay rival, todo se ve tan claro.
Quizás siempre me ha sobrado sentirme tan especial.
Quiero volver a pensar, ser capaz de distinguir.
Tantas veces hago tanto por otros pero, ¿y por mi?
Estoy perdido y mírame, dando consejos.
No quería tus halagos, solo buscaba respeto.
Desde aquí ni tu ni nadie va a decirme que no puedo,
todo es tan real como lo imagines antes en tu
cerebro. Me escondí tanto de mi,
que me alegro de volver a encontrarme hoy desde aquí.
Por debajo del disfraz,
se desgarra un alma de tanto gritar.
Tras la máscara no hay más
que una lucha interna por poder brillar.
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