FIESTA DE PIJAMAS
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LETRA:La mejor parte de un polvo no es el arte, ni el morbo de mirarte y saberte desnuda en instantes que voy contando, ni los preliminares, ni los juegos, ni la penetración, ni el orgasmo…
Lo mejor es contarlo, corazón, y qué pena tan grande no hacerlo porque no es aceptable que nos veamos tú y yo, y una moral creada por un miedoso que follaba bien poco, dice que no es amor que los dos nos besemos cuando él no mira, ¿Cómo pretendes amiga que no lo cuente si parece una porno? Un guión en vida. Si una ley mayor nos ha impuesto una orden de acercamiento, querida, ¿Cómo no voy a contar cuando fui a preguntar a tu oficina por un seguro de vida y un poco más y nos pillan? Y cada vez que me ve por ahí y me miras así, en plan “Me importas, pero paso de ti”.
Así que preciosa, has de entender que reúna a mis amigos noches grandiosas, y en petit comité cuente cosas. Hablaré de tus tetas, tus caderas marcadas, tus paletas separadas… Y ni una letra. Y tú pórtate bien y en tu fiesta de pijamas, entre chicas malas dilo, quítate el anillo y di que mueres por mí… Que hice temblar los cimientos que tu novio el arquitecto levantó una noche de invierno.
Así que cuenta, princesa, que interesa y no te dejes nada, endulza la vida de hogar de tus amigas casadas. Intensa, despierta la sexualidad en penumbras, profana nuestras tumbas, que vuelva el deseo al matrimonio por ley, que dejen a medio leer cincuenta sombras de Gray, que hay otro hombre y gracias a él te eres fiel, cuéntalo todo, cuenta que tu vibrador ya tiene nombre y apodo… Yo contaré de aquella vez, de aquel sábado estival que te casaste y me llamaste porque querías jugar al escondite en el convite y fantaseabas manchar, de negro pecado tu vestido blanco, es imposible no contarlo y cuando te haya perdido y no sea tu amigo habrá más pervertidos, y seguro que alguno se parece a mí. Yo describiré tu cara de “Soy buena, pero esta noche, solo por esta noche cariño, seré la más puta por ti”.
Así que preciosa, has de entender que reúna a mis amigos noches ociosas, los invite a buen vino y a más cosas, y les hable de ti y tus caderas morbosas, tus paletas de mentirosa… Tu nombre para mí. Y tú pórtate bien y en tu ruleta de chupitos, entre música y gritos dilo, quítate el anillo y di que mueres por mí… Que hice temblar los cimientos que tu novio el arquitecto levantó una noche de invierno, cuando todo era eterno, cuando para ir a su cielo no atajabas por mi infierno… Cuando tus alas no eran sus cuernos.
Lo mejor es contarlo, corazón, y qué pena tan grande no hacerlo porque no es aceptable que nos veamos tú y yo, y una moral creada por un miedoso que follaba bien poco, dice que no es amor que los dos nos besemos cuando él no mira, ¿Cómo pretendes amiga que no lo cuente si parece una porno? Un guión en vida. Si una ley mayor nos ha impuesto una orden de acercamiento, querida, ¿Cómo no voy a contar cuando fui a preguntar a tu oficina por un seguro de vida y un poco más y nos pillan? Y cada vez que me ve por ahí y me miras así, en plan “Me importas, pero paso de ti”.
Así que preciosa, has de entender que reúna a mis amigos noches grandiosas, y en petit comité cuente cosas. Hablaré de tus tetas, tus caderas marcadas, tus paletas separadas… Y ni una letra. Y tú pórtate bien y en tu fiesta de pijamas, entre chicas malas dilo, quítate el anillo y di que mueres por mí… Que hice temblar los cimientos que tu novio el arquitecto levantó una noche de invierno.
Así que cuenta, princesa, que interesa y no te dejes nada, endulza la vida de hogar de tus amigas casadas. Intensa, despierta la sexualidad en penumbras, profana nuestras tumbas, que vuelva el deseo al matrimonio por ley, que dejen a medio leer cincuenta sombras de Gray, que hay otro hombre y gracias a él te eres fiel, cuéntalo todo, cuenta que tu vibrador ya tiene nombre y apodo… Yo contaré de aquella vez, de aquel sábado estival que te casaste y me llamaste porque querías jugar al escondite en el convite y fantaseabas manchar, de negro pecado tu vestido blanco, es imposible no contarlo y cuando te haya perdido y no sea tu amigo habrá más pervertidos, y seguro que alguno se parece a mí. Yo describiré tu cara de “Soy buena, pero esta noche, solo por esta noche cariño, seré la más puta por ti”.
Así que preciosa, has de entender que reúna a mis amigos noches ociosas, los invite a buen vino y a más cosas, y les hable de ti y tus caderas morbosas, tus paletas de mentirosa… Tu nombre para mí. Y tú pórtate bien y en tu ruleta de chupitos, entre música y gritos dilo, quítate el anillo y di que mueres por mí… Que hice temblar los cimientos que tu novio el arquitecto levantó una noche de invierno, cuando todo era eterno, cuando para ir a su cielo no atajabas por mi infierno… Cuando tus alas no eran sus cuernos.