ICARO
Letra:
| Que paradójico fue ahora lo se, Me di cuenta que era un sueño justo cuando desperté No necesito un palacio ni tener delante, un millón de fans, que me hagan sentir importante Yo que canto para ella y para el, yo que, cumplo condena en este cuerpo bajo esta piel, yo, se como se hace yo, conozco el modo yo, aposte por mi mismo y lo perdí todo. Y Claro que quieren verme caer como Icaro, tengo un demonio en mis tímpanos, aveces me preocupo por la redención, pero suele terminal al final de esta canción amor No te vallas (no), no todavía, no mientras que mi cerveza, siga fría, ni dracula de día ni melodía sin silbido, es una oz no una flecha, lo que trae cupido esta escopeta no dispara parece no ser mi turno, mi cabeza no esta aquí tendrás que buscarla en Saturno, un beso por cada mil pensamientos a rojo, perdí la llave de tu corazón o cambiaste el cerrojo un toro que no aguanta el rojo un ruido tan desconocido, descubrir que no he roto, parece descocido, pero sigo vivo o al menos es lo que parece, la muerte se encargara de cobrarte por mas que reces. Y el sol derritió sus alas, su único testigo fue el mar y las olas, tanto a corte de ritmo a punta de pistola, hablan a mi espalda, me escuchan cuando están a solas Y el sol derritió sus alas, su único testigo fue el mar y las olas, tanto a corte de ritmo a punta de pistola, hablan a mi espalda, me escuchan cuando están a solas Para que contar las penas si puedes beber sonriendo, te preocupas por llegar, créeme nos estamos yendo, (y tu) me mandaste vuelo o mordiste el anzuelo, hoy solo se que van mentiras disfrazadas de consuelo en lo mas recóndito el corazón sale en las lagrimas, cierra la persiana americana y solo imagina, deja que tu mente razone e intuya, desde el principio del camino ella nunca fue tuya las huellas las borra el mar, (como) sobre la arena, por cada ola son diez mil pasos menos tuyos nena, renuncie a la gravedad para volar sin ser jalado, sin ser de ti, ni de este corazón esclavo de la cuna va a la tumba, un condenado errante, que no ve motivos ya para seguir adelante, es que no hay fuerza que mueva, una mente necia, y la realidad te alcanza en cuando acaba la anestesia Y el sol derritió sus alas, su único testigo fue el mar y las olas, tanto a corte de ritmo a punta de pistola, hablan a mi espalda, me escuchan cuando están a solas Y el sol derritió sus alas, su único testigo fue el mar y las olas, tanto a corte de ritmo a punta de pistola, hablan a mi espalda, me escuchan cuando están a solas |